Nos inspiran

El duelo es un proceso natural que se produce tras la experiencia de una pérdida. Este cambio supone un tiempo de adaptación que cada persona vive de una manera distinta. Tanto en entornos familiares como profesionales, quienes ejercen los cuidados pueden experimentar cambios físicos y emocionales que es importante conocer e identificar. El apoyo y el acompañamiento de las personas más cercanas, o de profesionales sanitarios si fuese necesario, es fundamental para poder afrontar y superar el duelo. ‘Decir adiós’, la nueva unidad de Escuela de Cuidados, explora la gestión emocional del duelo a través de la historia de Paula, Óscar y Natalia, quienes experimentan el duelo como hijos y cuidadora profesional, respectivamente. La unidad ofrece también los consejos de personas expertas para el acompañamiento emocional durante estos procesos.
Cruz Roja comenzó a trabajar con personas cuidadoras en España en el año 1997. Desde entonces, nuestra sociedad ha cambiado y, con ella, la situación y las necesidades de cuidados. Esta institución internacional ha evolucionado en el tipo de recursos y servicios que ofrece en este ámbito, combinando la atención presencial con los recursos online y la comunicación en redes sociales. Los datos de las personas atendidas por Cruz Roja revelan que en más de un 80% de los casos son mujeres quienes desempeñan los cuidados y, en muchos casos, lo hacen solas y sin ayuda. Apoyar y acompañar a quienes cuidan, para que puedan afrontar mejor y en mejores condiciones la situación que viven, es el objetivo del proyecto SerCuidadorA, con quien Johnson & Johnson colabora.
“Yo amo el Trabajo Social”. Hace 33 años que Mª Concepción Vicente es trabajadora social. A lo largo de su trayectoria profesional ha conocido de cerca el trabajo en el ámbito de la salud mental, en el área hospitalaria como Jefa de servicio en el Hospital Universitario Gregorio Marañón y como docente en la Universidad Complutense de Madrid. Su trabajo es fundamental para facilitar y asegurar la protección de derechos y la dignidad de personas que, por diferentes circunstancias, están en una situación vulnerable.
Imagina un proceso de casi 4 años en busca de un diagnóstico que explique lo que te está pasando. Ponte en la piel de quien recibe la noticia de que tiene una enfermedad que afecta a menos de 5 personas por cada 10.000 habitantes o trata de sentir cómo sería vivir con dolores crónicos el resto de tu vida. Esto es lo que aproximadamente 3 millones de personas en España, 30 millones en Europa y casi 300 millones en todo el mundo, viven cuando reciben el diagnóstico de que tienen una enfermedad rara.
(Datos: FEDER. Federación Española de Enfermedades Raras)